COMIENZA EL MISTERIO:

(48h ANTES.) Esther Nava, sentada en un bar con un café, habla por teléfono con una amiga:

«Ayer lunes, recibí una carta.

Es una invitación. Me la envían por tener una peluquería canina en la Sierra.

Esperanza Mendoza nos cita este jueves (¡nada menos que en su casa!) a quienes tengamos relación con el mundo de los animales. Según parece quiere crear un gran proyecto de protección animal, y quiere que la ayudemos.

No me apetece mucho ir, no la conozco casi, y decen que es bastante huraña… Además, está lo de la gran tormenta que anuncian en la tele…

¡Pero me muero de curiosidad por ver cómo es por dentro esa finca y el Antiguo Caserón del Cerro, herencia de sus ancestros, los Mendoza de la Sierra!

Sí. Decidido. Iré. Total ¿QUÉ PUEDE SALIR MAL?»